SIN SOSTENIBILIDAD NO HAY TURISMO,…¿HASTA QUE LO DIGAN LOS CLIENTES?
No concibo la actividad turística sin tener en cuenta la rentabilidad en sentido amplio; si se piensa a largo plazo aún es más inconcebible; parece lógico que el principal factor de producción de la industria turística, el territorio-recursos, y las personas, se tienen que considerar al máximo nivel para garantizar la actividad y su productividad.
España, como destino líder en recepción de turistas, inició el desarrollo de su industria bajo demanda, el objetivo más importante era la rentabilidad económica; en los últimos años, y para mantener la competitividad, destinos y empresas consideran el resto de rentabilidades, social, patrimonial, ambiental, y últimamente la rentabilidad emocional del visitante, el portafolio de experiencias que ofrecen los agentes del sector para seguir siendo competitivos.
La mayor parte de empresas líderes del sector han incorporado la sostenibilidad dentro de su estructura operativa, algunas con ambición estratégica y convicción, y otras con objetivos de marketing. En el resto de empresas del sector, en su mayoría PYMES, existen empresarios comprometidos con la conservación del territorio, la sociedad en la que se ubican, y el uso eficiente de los recursos desde que planifican su inversión, construyen y operan; y empresarios para los que la sostenibilidad se ciñe a cumplir la Ley en lo que respecta a variables ambientales.
La administración pública, en algunos casos con la colaboración del sector privado, también ha incorporado la sostenibilidad en la planificación turística, “Lograr en el año 2020 que el sistema turístico español sea el más competitivo y sostenible, aportando el máximo bienestar social” así reza la meta del Plan de Turismo Español Horizonte 2020. Buena meta para enfocar los trabajos y las políticas para conseguirla.
¿Y el consumidor turístico?, ¿tiene en cuenta la sostenibilidad a la hora de elegir un destino o una empresa?, y de forma previa ¿qué considera dentro de la sostenibilidad?. Existen pocos estudios de investigación de mercado, la mayor parte son estudios de tendencias que se pueden resumir en el aumento de la conciencia acerca de cómo contribuyo en mi viaje a la sostenibilidad, bien sea reduciendo el consumo de agua, mitigando emisiones de CO2, colaborando en proyectos para su compensación, comprando servicios y productos locales, preservando los recursos patrimoniales visitados, bien sean culturales o naturales, etc.
Si bien la afirmación de sin sostenibilidad no hay turismo a medio y largo plazo es cierta, también lo es que hasta que el consumidor no demande de forma general destinos, productos y servicios que de una u otra forma contribuyan a la sostenibilidad, ésta no será una realidad; y por lo tanto no tendremos asegurada la actividad turística en el futuro, y lo que es más importante, si no se incorpora en todos los sectores económicos no tendremos el futuro asegurado para nuestras futras generaciones.
Y aquí es donde las empresas y destinos tienen una gran responsabilidad, y una gran oportunidad, pues pueden contribuir a crear conciencia en el consumidor, a potenciar en el cliente una actitud de responsabilidad de cara a la conservación de los valores naturales, culturales, sociales y económicos. Un trabajo bonito y todo un reto ¿se apunta?